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martes, 14 de abril de 2015

REGRESO A CLASES

Hola a tod@s, después de estas vacaciones de Semana Santa, que para algunos fueron 2 semanas de descanso, para otros 2 semanas de planeación, pero ¿que sucede cuando los niños regresan a clases?, ¿como hacer que se sientan mejor?, que no tengan estrés, ¿como podemos ayudarlos a conseguir el éxito?.

Como padres queremos lo mejor para ellos y les dejo aquí unas reflexiones.


Además de tener sus problemas personales, los niños y las niñas dan cuenta de todo lo que sucede en casa, si tienen problemas de pareja, problemas económicos, una familiar enfermo, todo lo perciben y de alguna forma, les causa un poco de conflicto, ver o sentir que sus padres se encuentran estresados y preocupados por algo, esos problemas también los afectan a ellos, aún si quererlo. 

Debemos de prepararlos para abatir y afrontar la frustración mientras fortalecemos sus cualidades, los niños necesitan alguien que crea en ellos, el Dr. Ginsburg resume lo que sabemos con certeza sobre el desarrollo de la resiliencia en niños con lo siguiente: 


La resiliencia es la capacidad para afrontar la adversidad y lograr adaptarse bien ante las tragedias, los traumas, las amenazas o el estrés severo. 
Ser resiliente no significa no sentir malestar, dolor emocional o dificultad ante las adversidades. La muerte de un ser querido, una enfermedad grave, la pérdida del trabajo, problemas financiero serios, etc., son sucesos que tienen un gran impacto en 
las personas, produciendo una sensación de inseguridad, incertidumbre y dolor emocional. Aún así, las personas logran, por lo general, sobreponerse a esos sucesos y adaptarse bien a lo largo del tiempo.
El camino que lleva a la resiliencia no es un camino fácil, sino que implica un considerable estrés y malestar emocional, a pesar del cual las personas sacan la fuerza que les permite seguir con sus vidas frente la adversidad o la tragedia. Pero, ¿cómo lo hacen?

La resiliencia no es algo que una persona tenga o no tenga, sino que implica una serie de conductas y formas de pensar que cualquier persona puede aprender y desarrollar.


• Los niños necesitan saber que hay un adulto en sus vidas que cree en ellos y los ama de manera incondicional. 
• Los niños vivirán a la altura o por debajo de nuestras expectativas. 
• No hay ninguna respuesta simple para garantizar la resiliencia en cada situación. Sin embargo, podemos desafiarnos a ayudar a nuestros hijos a desarrollar la capacidad de negociar sus propios retos y a ser más resilientes, más capaces y más felices. 

Características de las personas resilientes:


Las personas resilientes poseen tres características principales: saben aceptar la realidad tal y como es; tienen una profunda creencia en que la vida tiene sentido; y tienen una inquebrantable capacidad para mejorar.
Además, presentan las siguientes habilidades:
  • Son capaces de identificar de manera precisa las causas de los problemas para impedir que vuelvan a repetirse en el futuro.
  • Son capaces de controlar sus emociones sobre todo ante la adversidad y pueden permanecer centrados en situaciones de crisis.
  • Saben controlar sus impulsos y su conducta en situaciones de alta presión.
  • Tienen un optimismo realista. Es decir, piensan que las cosas pueden ir bien, tienen una visión positiva del futuro y piensan que pueden controlar el curso de sus vidas, pero sin dejarse llevar por la irrealidad o las fantasías.
  • Se consideran competentes y confían en sus propias capacidades.
  • Son empáticos, Es decir, tienen una buena capacidad para leer las emociones de los demás y conectar con ellas.
  • Son capaces de buscar nuevas oportunidades, retos y relaciones para lograr más éxito y satisfacción en sus vidas.

COMPETENCIA 

La competencia describe la sensación de saber que puede manejar una situación de manera efectiva. Para favorecer el desarrollo de la competencia, podemos: 
• Ayudar a los niños a centrarse en sus fortalezas individuales. 
• Centrar los errores identificados en incidentes específicos. 
• Capacitar a los niños para tomar decisiones. 
• Tener cuidado de que el deseo de proteger a nuestros hijos no envíe el mensaje erróneo de que no los consideramos competentes para manejar las cosas. 
• Reconocer las competencias individuales de los hermanos y evitar las comparaciones. 


CONFIANZA 
La confianza de un niño en sus propias habilidades deriva de la competencia. Para aumentar la confianza, puede: 

• Centrarse en lo mejor de cada niño para que este también pueda verlo. 
• Expresar claramente las mejores cualidades, como justicia, integridad, persistencia y amabilidad. 
• Reconocer cuando su hijo hizo las cosas bien. 
• Elogiar honestamente logros específicos y no brindar un elogio difuso que pueda carecer de autenticidad. 
• No obligar al niño a abarcar más de lo que realmente puede manejar. 




CONEXIÓN 
El desarrollo de vínculos estrechos con la familia y la comunidad crea una sólida sensación de seguridad que permite desarrollar valores firmes y evita los caminos destructivos alternativos al amor y a la atención. Para ayudar a su hijo a conectarse con otras personas, puede: 
• Crear una sensación de seguridad física y emocional dentro de su hogar. 
• Permitir la expresión de todas las emociones, para que los niños se sientan cómodos comunicándose durante los momentos difíciles. 
• Afrontar el conflicto abiertamente en la familia para solucionar problemas. 
• Crear un área común donde la familia pueda compartir tiempo (no necesariamente tiempo frente al televisor). 

• Promover relaciones saludables que reforzarán los mensajes positivos.





CARÁCTER 
Los niños necesitan desarrollar un conjunto sólido de sentido moral y valores para diferenciar el bien del mal y demostrar una actitud de afecto hacia otras personas. Para fortalecer el carácter de su hijo, comience por: 
• Demostrar cómo afectan las conductas a otras personas. 
• Ayudar a su hijo a reconocerse como una persona afectuosa. 
• Demostrar la importancia de la comunidad. 
• Fomentar el desarrollo de la espiritualidad. 
• Evitar las expresiones racistas y agresivas, o los estereotipos. 





CONTRIBUCIÓN 
Los niños necesitan saber que el mundo es un lugar mejor porque ellos están en él. Si entienden la importancia de la contribución personal, esta puede ser una fuente de propósito y motivación. Para enseñar a sus hijos cómo contribuir, puede: 
• Comunicarles que muchas personas en el mundo no tienen lo que necesitan. 
• Enfatizar la importancia de servir a los demás siendo ejemplos de generosidad. 
• Crear oportunidades para que cada niño contribuya de una manera específica.




AFRONTAMIENTO (DEL INGLÉS, COPING) 
Si su hijo aprende a afrontar el estrés con eficacia, estará mejor preparado para superar los retos de la vida. Las lecciones de afrontamiento positivo son, entre otras: 
• Modelar estrategias de afrontamiento positivo de manera continua. 
• Guiar a su hijo para desarrollar estrategias de afrontamiento positivas y efectivas. 
• Saber que no será efectivo decirles que no sigan con su conducta negativa. 
• Comprender que muchas conductas riesgosas son intentos de aliviar el estrés y el dolor en las vidas diarias de los niños. 
• No condenar a su hijo por conductas negativas, aumentando posiblemente su sensación de vergüenza. 



CONTROL 
Los niños que saben que pueden controlar las consecuencias de sus decisiones tienen más probabilidades de saber que tienen la capacidad de recuperarse. Que su hijo comprenda que puede marcar una diferencia fomenta aún más la competencia y la confianza. Para facultar a su hijo, puede: 
• Ayudarlo a entender que los sucesos de la vida no son meramente aleatorios y que la mayor parte de lo que sucede es el resultado de las elecciones y acciones de otras personas. 
• Aprender que la disciplina tiene que ver con enseñar y no con castigar o controlar, y usar la disciplina para ayudar a su hijo a entender que sus acciones producen determinadas consecuencias. 


Espero que les sirvan y los compartan.
Saludos.

Dra. Felisa Lebrero


Fotos: Google. 
Healthychildren.org.

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